El clásico miedo de película

Nuestra memoria colectiva nos hace que con solo pequeños factores o guiños nos hagan que nos tiemblen las canillas. Muchas veces no sabemos a qué se debe. Y otras nos damos cuenta que son producidas por imágenes de películas.

Grandes éxitos que han marcado a muchas personas en todo el mundo. Hasta tal punto de producir este pánico a personas que ni siquiera saben el título de la película, pero que si pueden reconocer tan gracias a una escena concreta.

Y no es de extrañar, pues aunque, como en este caso, hablamos de películas de terror con más de 20 años, son clásicos que han inspirado a muchos otros directores o sketch de algunas de las mejores series como pueden ser Los Simspon, Friends hasta más recientes como Big Bang Teory.

Te invitamos a que te unas a reconocer y poner en práctica esta forma de disfrazarse y jugar con el subconsciente de las personas y este miedo común. Además, es una manera muy fácil de poder disfrazarte de manera original buena, bonita y barata.

“El resplandor”, Stanley Kubrick. 1980

Cuando hablamos de esta película, siempre nos vienen a la cabeza las eternas hermanas gemelas que lo único que hacían era darse la mano. Pero eso bastaba para que te las encuentres en un pasillo solitario y salir echando tus pies humo.

Sin embargo, he encontrado una imagen mucho más original y que puede servirte de manera individual, con la que tendrás que mantener un gesto inquietante durante horas. Por lo cual no es recomendable para los de risa fácil.

Hablamos de representar la imagen de Jack Nicholson, en su papel de Jack Torrance. Cuando la locura le invade y se vuelve loco a romper puertas ayudado con su hacha. ¿Ya te tiemblan las piernas, verdad?

Para este disfraz solo necesitamos una chaqueta roja, una camisa de cuadros, tener el pelo un poco con entradas, revuelto y un cartón o corcho, el que simule un trozo de puerta donde asomarnos. No olvides el maquillaje, simular ojeras con algo de maquillaje rojo y pintarte las cejas picudas, al más estilo Nicholson. Un hacha de atrenzo también puede ir bien.

Recuerda no dejar de sonreír y abrir mucho los ojos.

“Los Pájaros”, Alfred Hitchcock, 1963

Sin duda el rey del suspense sabía lo que se hacía con esta cinta. La que se convirtió en la pesadilla de gente que tiene fobia a los pájaros. Y no es para menos, en mi opinión ella fue la causante de este tipo de traumas. Pues solo pensar que miles de pájaros llegan en bandada a tu ciudad sin saber cómo ni por qué… es algo que desconcierta y pone los pelos de punta a cualquiera.

Para representar esta película necesitas muy poco, pero sin duda es muy original. Hablamos de disfrazarte del personaje de Melanie (Tippi Hedren). Para lo que necesitaras una melena rubia, algo cardada y un traje simulando a los que lleva la actriz en la película. En este caso es el traje verde que lleva en la escena en la que los pájaros, de todo tipo, le atacan.

Solo necesitas encontrara varios pájaros de plástico, los que pegaras en el traje, despeinarte el cabello y, como en este caso, pintarte algo sangrienta (cortesía de la casa). Si elijes, como en la imagen, cuervos, dará más sensación de pánico y drama.

“Carrie”, Brian De Palma (Stephen King), 1976

Si tuviera que elegir una película de miedo, sin duda seria Carrie. Y es que de una película basada en una novela de Stephen King no se puede esperar menos. Y eso que es antigua, pero sigue siendo, y con medios visuales mediocres, una de las historias más sorprendentes e inquietantes que conozco. La única que cuando ves a gente morir piensas “Ole Carrie, ¡que ardan todos!”, simpatizando con el personaje malvado.

Y es justo esa escena la que representa la siguiente opción, el momento justo en el que derraman sobre la dulce Carrie toda esa porquería. Y digo dulce porque como cualquier adolescente, ella solo tenía “algunos problemillas” que la hacían diferente.

Para disfrazarte de esta escena, solo necesitas un vestido blanco que puedes hacerlo con algo de semiraso o aprovechar alguno viejo. Soltarte el pelo y hacerte, en modo de corona, una estructura que sostenga un cubo. Cubriendo los alambres de tela roja, para que intérprete la sangre. Para terminar mancharte un poco con pintura roja la cara y brazos. Coge más retales rojos para incorporarlos en el vestido como manchurrones.

Otra forma seria directamente untarte sangre artificial por el pelo, cara, brazos y vestido. Aunque con ello tendrás que despedirte de tu vestido y puede que causes algún que otro infarto. A parte de que no te dejen sentarte en ningún sitio… Así que se practica.

Creo que con esto, ya estáis preparados para que vuestros amigos, conocidos y pobre gente con la que os crucéis, no pueda dormir esa noche reviviendo estas escenas de los maestros del terror.

 

Pequeños malvados de película

Como cada año cuando llega Halloween, son muchos los que se inspiran en películas para realizar sus disfraces. Pero más aun los que, por una día, dejan apartado a sus héroes para ponerse en el papel de los malvados o villanos.

Porque reconozcámoslo, es mucho más divertido ser malo y más aún aterrorizar a los demás. Porque son más los que sueñan con Freddy Krueger que con… ¿Alguien se acuerda de quien eran los protas de sus pelis?

Pero si hay algo que aterre a todos por igual son los niños cuando se disfrazan. Con solo una niña en camisón, pálida, despeinada y cabizbaja en un pasillo, no se necesita más, consigue despertar el pánico a todos los que con ella se cruce. Algo más elaborados son los siguientes disfraces, los que os aseguro que os produciría mínimo una risa nerviosa si os piden caramelos con esta pinta.

Chucky ha vuelto

Nunca me dio tanto miedo un muñeco desde Jaimito, la marioneta de Jose Luis Moreno…No se la de veces que me he desvelado para guardar a mi Baby Feber solo porque también era pelirrojo temiendo que cobrara vida como el personaje de El Muñeco Diabólico.

Algo que se ve que también pensaron los padres de este niño, que por el simple hecho de ser pelirrojo sus padres no dudan en disfrazar de Chucky, y la verdad es que he visto otros niños disfrazados, pero este es tan autentico que hasta las cicatrices lo parecen. Para el disfraz solo necesitas un peto vaquero, una camiseta de rallas el pelo o peluca pelirroja hacia atrás, un par de cicatrices en la cara y algún hacha o cuchillo de atrezo.

El Joker, ya un mítico

Mira que ha habido Joker representados en la película de Batman, pero el que interpreto el desaparecido Heath Ledger en Batman, el Caballero Oscuro ninguno, ni siquiera el mismísimo Jack Nicholson. Y es que Legder consiguió dar un carácter terrorífico y más desquiciado aun a este archienemigo del hombre murciélago.

Como vemos en este niño, la fuerza del disfraz está en el maquillaje, el cual es perfecto, ya que es corrido y nuestro hijo no podrá nada más que mejorarlo conforme pase el día. No olvides echarle spray verde para pelo (al lavarlo se quita). Y ponle un traje con chaleco. Listo

¿Juguemos a un juego?

Nunca una invitación para jugar había sido tan…escalofriante. Y esto es lo que consigue el muñeco de la saga Saw. El cual por cierto, creo que nadie sabe cómo carajo se llama. Lo importantes es que es un muñecajo de aparentemente la cara de cerámica. ¿Porque nadie le empuja y se lo carga?

Para este disfraz es necesario comprar una careta del personaje, nada difícil. Luego solo tendremos que vestir al pequeño con un traje negro, unos guantes y pajarita y zapatos rojos vivos. Para mejorarlo hacer que vaya en triciclo.

Por cierto, se llama Billy.

El fin del mudo

No, el titulo no es una errata, hoy queremos hacer un guiño a esos trajes que siempre surgen a última hora, sin saber muy bien cómo, pero que siempre funcionan. En este caso, a alguien se le ocurrió un “oye… ¿y si amos de cine mudo?”. Un traje rápido, barato y muy original al que poder sacarle mucho juego en cualquier fiesta.

Y ese es el fin de la tarde, buscar cualquier cosa que nos sirva para poder disfrazarnos de estos actores del cine en blanco y negro, los cuales dominaban la mímica en ocasiones, con rasgos dramáticos y una atmósfera romántica.

¿Qué buscar para el disfraz?

El primer caso, como en cualquier disfraz, es buscar imágenes de la época (principios del siglo XX) y de actores de películas mudas como el ya icono Buster Keaton, el genial Charles Chaplin o el ojo más famoso del cine Simone Maureuil.

Siempre es más fácil a la hora de disfrazarse buscar una referencia visual y ceñirnos a ella, así evitaremos confusiones o pequeños errores. Una vez que tengamos claro la estética que buscamos necesitaremos todo nuestro vestuario de negros y blancos, intentando siempre que sea antiguo, para no dañarlo.

Para ella: Podemos elegir para ello un vestido negro que sea de corte recto, simulando años 20. Estos son todos los que tengan flecos o tengan cintura baja. Si no lo tenemos podemos intentarlo con alguno que tengamos incorporando un cinturón en la cadera.

Medias negras, zapatos cerrados o de tacón cuadrado y algún chal.

Lo que podemos comprar y nos quedara más auténtico será comprara unos guantes largos blancos, un adaptador largo para fumar cigarros y algún adorno en el pelo, tipo encaje blanco.

Para el pelo se puede llevar una peluca de melena corta, tipo “Amelie” o probar algún peinado basado en ondas al agua. Hay muchos tutoriales YouTube buscando “ondas al agua” o bien “peinados años 20”.

Para él: Cogeremos o bien un traje negro y camisa blanca y un bombín o sombrero. También podemos probar con unos pantalones oscuros, tirantes y camisa blanca, acompañado de una gorra al más estilo chico del periódico. Es muy importante basarse en la estética de los años 20.

¿Cómo maquillarnos?

Para empezar necesitaremos una barra de maquillaje blanco, para dar ese aspecto pálido de las primeras películas, y sobre todo, la sensación de estar en blanco y negro. Una vez teniendo esta base, empezaremos con el maquillaje de aspecto dramático.

Para conseguirlo tendremos que basarnos en el maquillaje Flapper, común en los años 20. Pero hay que recordar que siempre en todos negros y grises.

Detalles de película

Si quieres triunfar en la fiesta, crea graciosos letreros con frases o peticiones, así podrás integrarte en la fiesta sin decir una sola palabra, utilizando solo la mímica.

 

Cine, cine, cine, cine…

¡¿Cómo nos puede gustar tantísimo tener una excusa para disfrazarnos de nuestras pelis favoritas?! Hay gente que son auténticos artistas del disfraz. De la nada sacan ideas a presupuesto mínimo, que por mucho que las tengas delante nosotros no vemos o nunca se te hubieran ocurrido.

Y la verdad es que los ejemplos que os traemos hoy no son nada complicados ni las películas son desconocidas. Yo diría que mínimo las habrás visto 5 veces. A ver que os parece la selección… ¡Acción!

Ace Ventura: detective de mascotas

De esta guisa se presentaba en la saga de “Ace Ventura”. Un detective un tanto excéntrico dispuesto a resolver los secuestros de todo tipo de mascotas, al que daba vida el actor y cómico Jim Carrey, allá por el 1994.

Un disfraz nada complicado y que todo el mundo reconocerá en el momento. Solo necesitas tener el pelo un poco largo, lo suficiente para hacerte un tupé. En cuanto al atuendo, una camiseta interior blanca y arriba de esta una camisa de estética hawaiana. Unos vaqueros un tanto altos, un cinturón y unas botas altas.

Para clavar más al personaje te sugerimos que busques en Internet imágenes del carnet que lucía Ventura en la película y añadas tu foto. Ya sabes, nunca salgas sin la documentación cuando sales de fiesta.

Leeloo, el elemento clave en cualquier fiesta

“El quinto elemento” fue una película clave de la Ciencia Ficción allá en el 97. Que todos recordaran por la guapa Milla Jovovich, que encarnaba el papel de Leeloo.

Avisamos que para este traje debes de ser una chica atrevida. Para empezar tendremos que conseguir una peluca naranja. Ahora solo tendremos que hacernos el traje. Que no es más que una braga blanca o bikini bajo al que le coseremos banda vertical que unan la braga con otra banda al cuello. De esta tiene que salir otras dos horizontales que tapen pecho y cintura.

De la braga también saldrán dos tiras en cada pierna hasta por encima de la rodilla. De las cuales saldrán dos tiras horizontales que rodeen cada una de las piernas.

El Náufrago y Wilson

La unión que nació cuando Chuck (Tom Hanks) tiene un accidente a lo Robison Crusoe, en la película “Naufrago”, y no le queda más que la compañía de una pelota voleibol, Wilson.

Para ello uno de vosotros solo deberá tomar la apariencia de náufrago: Peluca larga desaliñada y barba a juego y una faldita de piel a modo de taparrabos. Otro deberá ser esta pelota personalizada. Para ello debes hacerte un cuerpo redondo (prueba hacer la estructura con alambre, papel de periódico y cola). Pintarla de blanco y hacer el dibujo característico en rojo.

Al fin y al cabo, los amigos los elige cada uno.

Padres de película

No hay nada como compartir con tus hijos tu tiempo y más cuando hacemos algo que cualquier persona es lo que más anhela al ser padre, INFLUIR. De ahí el término de “dar la paliza padre”. El coger a tu hijo y enseñarle canciones, grupos y, como no, ¡que sea de tu equipo de fútbol! Es algo que todo ser humano desea.

Pero, como siempre, hay personas que siempre van a más. Aquí os mostramos como los  padres más cinéfilos utilizan cualquier excusa para disfrazarse con sus hijos de grandes películas que a su vez ellos vieron de niños.

¿Hay algo que pueda unir más que esto?

Sayonara (con mi) baby

Si tu padre es un tipo duro que daría lo que fuera por salvarte de cualquier situación y puede mantener la cara cartón, inexpresiva, durante toda una tarde. Este es vuestro disfraz. Con el que podrás fardar de androide cubierto de sangre y con la ropa hecha trapos.

Imprescindible una cazadora de cuero para el padre, una ametralladora 100% pvc made in china y no pueden faltar unas gafas de sol.

Para el hijo una cazadora de camuflaje y conseguir llevar esas melenas que también lucia de Edward Furlong.

Hay que eliminar a megatrox

Si eres un padre de los que piensan “si, si..Pocoyo enseña mucho… Pero como los dibujos de antes ninguno”. Este disfraz te encantara. Es mucho más complejo de realizar, pero ¿no me digas que no es chulo? Un disfraz de los que hace historia.

Si tu hijo/a es aun pequeño es la oportunidad de ir de esta guisa. Te recomendamos no ir solo, porque con tanto cachivache, cambiar los pañales a tu retoño…no hay transformación que te sirva.

Regreso a la infancia

Como si el mismísimo McFly se hubiera colado regresando del futuro al presente. Así se verá tu hijo con este disfraz. El cual no tiene mucha elaboración, solo ser un manitas y construir un coche parecido al mítico de “Regreso al Futuro” encima de un coche o triciclo de tu hijo.

Una manera divertida de pasear a tu hijo y que disfrute con su juguete nuevo. Y a la vez que puedas fardar de tu creación basada en la película que a tantos nos hizo soñar con un futuro de coches voladores.

Un ejemplo de cómo invertir tiempo con tus hijos y poder inculcarles las películas que tan buenos ratos te hicieron pasar en la infancia.

Disfraces sorprendentes para Carnaval

Quizá este carnaval te apetezca encontrar alguna idea original y divertida para disfrazarte. Las propuestas que te damos hoy son bastante curiosas y económicas, puesto que son disfraces caseros. En todo caso, dejarás a tus amigos con la boca abierta si te decides por cualquiera de estas opciones.

  1. Disfraz de bolsa de gominolas: la ropa que lleves por debajo del disfraz no importa demasiado, eso sí, procura que tenga un color plano. Si eres mujeres, quedaría bastante bien que anudases tu pelo con lazos, a ser posible, uno grande que recoja tu cabello en una coleta. Inflarás una bolsa de globos de los más pequeños, que serán los que simularán las gominolas: a estos les puedes atar etiquetas que confecciones tú mismo con cartulina o papeles de colores. Consigue una bolsa de plástico grande y haz agujeros en la parte inferior para que puedas sacar las piernas por ahí; después llena la bolsa con los globos. Los agujeros de las piernas tendrán que graparse a la ropa y la parte superior también, para que las «gominolas» no se escapen.

    Foto: http://www.quickandsimple.com/
  2. Disfraz de Madre Naturaleza: en primer lugar, consigue ropa verde o marrón para la base. Después tendrás que confeccionar un montón de elementos que pegarás a tu ropa: hojas, flores, animales: todos ellos los puedes hacer con cartulina; también puedes usar elementos de otros materiales, como insectos de plástico, proporcionándole a tu disfraz texturas variadas. Para la cabeza puedes usar una corona de hiedra o construir un nido ficticio que usarás de sombrero.
  3. Un suelo de cine: basta con que te vista con ropa de color oscuro y pegues un montón de palomitas por todas partes. También puedes pegar alguna entrada antigua que aún conserves en casa.
  4. Estrella de cine en blanco y negro: esto es bastante sencillo. Basta con que te vistas de blanco y negro, combinando siempre ambos colores, para crear contrastes. Después pintarás tu cara de color blanco y, si no eres moreno, usarás una peluca negra.
  5. Autopista: sólo tienes que pegar o coser trozos pequeños de cinta blanca, simulando las líneas, en una base de ropa uniforme de color gris o negro. Después, tendrás que pegar (ya sea con velcro o cualquier otro método), coches de juguetes que estén atravesándote.
  6. Para hacer este disfraz necesitas un paraguas de color blanco, rosa o amarillo y tiras de un papel que tenga un color semejante. Si consiguieses un paraguas transparente sería estupendo: en ese caso, le vendría muy bien plástico de burbujas para confeccionar las patas. Si quieres, puedes vestirte de azul o verde, pegando sobre tu ropa algún elemento que simule el fondo marino, como rocas o algas de cartulina, así como peces de colores.

Disfraces y cine

No puedo decir que sea un cinéfilo, a no ser que el hecho de que te entusiasmen una docena de películas y el resto las pongas en cajones que van desde “entretenida” a “peñazo insufrible” te convierta en un amante del séptimo arte. Sin embargo, reconozco que muchos de mis disfraces se han inspirado en personajes de película.

Como excepción, no voy a entrar en cómo se hacen unos u otros trajes, por lo demás, en su mayoría muy sencillos o, en todo caso, muy fáciles de encontrar en cualquier tienda, especializada o no. Lo que pretendo es enumerar los personajes o películas que han trascendido de la pantalla a la calle y que me han llamado la atención. Ni siquiera voy a llevar un orden o a ser exhaustivo: al fin y al cabo hablamos de una fiesta loca: hablamos de Carnaval.

Y voy a empezar, porque me apetece, por los clásicos entre los clásicos: los monstruos y los superhéroes: Si nos dieran un euro por cada Superman, Batman, Spiderman… que hemos visto, ahora mismo tendríamos… Unos cuantos euros más. Pero es que ocurre lo mismo con los vampiros, hombres lobo o incluso el Yeti.

Superdisfraces

Claro que del género de los superhéroes, a mí me encanta El Cuervo. Recuerdo que un año me vestí de negro, me hice con una gabardina de plástico de ese mismo color y me pinté la cara de blanco con rombos negros sobre los ojos: no me captaron: me dijeron que si iba de Joker, de zombi… Incluso de miembro de Kiss. Yo, lejos de enfadarme me sentía orgulloso de mi particular homenaje a Bandon Lee.

Otra fuente de inspiración es la que suponen las películas de dibujos animados: desde las niñas disfrazadas de Princesas Disney, o los niños de príncipe azul -o de Bequelar, no lo tengo muy claro-hasta comparsas enormes pintadas de azul imitando a los pitufos, pocas son las animaciones que se salvan.

Hay muchas más posibilidades

De nuevo, dentro de este grupo me quedo con dos disfraces: de un lado, el robot animado de Wall-E; y de otro un “disfraz en equipo”, el de la familia de “Los increíbles”. No he llevado nunca ninguno de ellos, pero todo se andará.

Me dejo en el tintero muchos más géneros. Pero lo hago a propósito, con la idea de escribir otro artículo en el que podríamos habar de disfraces basados en películas o personajes cómicos y, cómo no, de ciencia ficción, desde una galaxia muy lejana…

Disfrazarse en pareja

Debido a que los Carnavales son las fiestas populares más alegres que se celebran en nuestro país, si nos queremos disfrazar, lo más adecuado es dar con un traje que tenga un toque de diversión. Como hemos comentado otras veces, no es necesario gastar grandes sumas de dinero comprando nuestro traje. De hecho, en tiempos de crisis, la mejor es fabricarlo nosotros mismos. Lo único que nos falta para motivarnos y ponernos manos a la obra, es encontrar una idea novedosa.

Una opción que no debemos desdeñar es ponernos de acuerdo con alguien para hacer un disfraz conjunto, es decir: podemos en grupo o por parejas.

La cuestión de las parejas parece bastante sencilla, ya que tenemos un amplio repertorio en la cultura popular para elegir el que más nos guste.

Si somos románticos, podremos optar por opciones como Romeo y Julieta o disfrazarnos de príncipe y princesa; aunque si queremos conservar ese toque romántico conservando un añadido gamberro, podemos optar por parejas del tipo de Chucky (el muñeco diabólico) y su novia.

En el caso de que los disfrazados sean un hombre y una mujer de edades diferentes (o complexión), pueden optar, cómicamente, por confeccionar los trajes de Heidi y de su abuelo.

Si nos gustan los superhéroes, se nos abre un amplio abanico de posibilidades, ya que todo héroe de cómic tiene una (o varias) némesis clásicas. Es más, en algunos casos, como en el de Batman, no necesitamos recurrir a némesis, ya que siempre le quedará su fiel compañero Robin. Recurriendo al cómic nacional, siempre existe la posibilidad de optar por Mortadelo y Filemón o Zipi y Zape.

El mundo de los videojuegos es un recurso bastante importante. El disfraz de Mario y Luigi tiene mucho éxito: de hecho, algunos grupos lo completan con más personas que se disfrazan, por ejemplo, de princesa, de seta o de Bowzer.

Una opción especialmente buena para hermanos gemelos, aunque válida para cualquier pareja, es disfrazarse en conjunto del Doctor Yekill y Mr. Hyde; o, por ejemplo, de Superman y Clark Kent. En definitiva, cualquier individuo con doble personalidad puede ser una opción muy divertida para una pareja.

Para los más clásicos, podéis disfrazaros de El gordo y el flaco, especialmente si contáis con la ventaja de tener unas complexiones similares a estos personajes; por otro lado, si preferís lo nacional, una opción bastante divertida puede ser representar a Joselito y Marisol.

Si quieres ir en pareja, pero os apetece un disfraz singular, siempre será una buena opción decirse por representar cualquier animal de cuatro patas: vacas, caballos, etc.

Para finalizar, si eres un solitario empedernido, pero te gustan los animales, siempre puedes disfrazar a tu perro de Dartacán mientras tú te disfrazas de Dartagnan. Seréis la pareja de moda.