La pintura, complemento o base del disfraz

Un maquillaje mal realizado puede destrozar el mejor disfraz. Por mucho dinero que haya invertido en ropas y pelucas si al final aplica un maquillaje cutre y que de un aspecto apresurado y chapucero, el resultado nunca será convincente.

Sin embargo un maquillaje bien realizado puede hacer que el disfraz casero más sencillo sea el foco de atención de una fiesta. No es tarea fácil realizar un buen acabado con las pinturas si no se tiene experiencia,  así que a no ser que tengamos mucho potencial artístico o un amigo mañoso, es mejor comenzar por pinturas sencillas y que queden aparentes y bonitas.

La pintura puede ser el único disfraz.

Efectivamente, una buena caracterización con pinturas puede ser lo único que necesitemos para disfrazarnos. Hay verdaderos artistas de la pintura corporal capaces de cubrir nuestro cuerpo con sus creaciones, pero realmente no creo que sea necesario llegar a tanto.  Una fiesta de cumpleaños infantil se animará si se disfraza a los niños con pinturas faciales de gatitos, tigres, calaveras o dulces cachorros de perro.

Cualquiera de nosotros, siguiendo sencillas instrucciones que podemos ver en cualquier video tutorial, podemos realizar estos sencillos disfraces para los que tan solo necesitaremos una caja de ceras aptas para aplicar en piel. Los pequeños de la casa lo encontrarán muy divertido y para nosotros será mucho más sencillo y económico que una fiesta de disfraces convencional.

Además, el proceso de maquillaje en si ya será toda una fiesta para ellos, que podrán ver como se pinta a sus amiguitos mientras esperan impacientes su turno. Si se les permite colaborar bajo nuestra supervisión la diversión será ya insuperable. Y,  ¿por qué no probar en una fiesta de adultos? Quizás le sorprendan y se diviertan como niños… ¡o más!

Cuidado con las alergias en las pieles sensibles.

La piel de los niños y la de algunos adultos, puede ser muy sensible. Es mejor comprar estos productos en droguerías o perfumerías que nos garanticen la calidad de las ceras y que estas son hipoalergénicas.  En las tiendas de disfraces también podremos encontrar pinturas de calidad con todas las garantías sanitarias.

Hacernos con estos productos en un bazar puede ser más barato, pero el ahorro que nos supone saldrá caro si nuestros hijos, o nosotros mismos, acabamos en la consulta de un dermatólogo con alguna molesta erupción. Ser ahorrador es bueno, ser tacaño puede ser peligroso.

Face Painting para el próximo Carnaval II

Continuamos hablando sobre la historia y la práctica del face painting. El próximo Carnaval está a la vuelta de la esquina, por lo que quisiéramos recordar esta práctica artística para que poder completar nuestros disfraces o, simplemente, divertirnos conociendo una forma de disfrazarnos que no implica ningún elemento material más allá de la pintura.

En la primera parte de este artículo explicamos cómo los antecedentes más remotos del face painting datan de fiestas y rituales de pueblos antiguos como las tribus indígenas de Sudamérica o los pueblos prehistóricos. Y, comentábamos también, el hecho de aquellas celebraciones eran los actos más similares a los carnavales que celebramos hoy en día.

Aunque e face painting es mucho más frecuente en niños, muchos jóvenes y adultos encuentran atractiva la idea de disfrazarse pintando su cara. De este modo, donde es más frecuente es entre los cosplayers o personas que quieren completar otros disfraces, de muy diverso tipo: desde el de hada, hasta el de zombi.

Existen diferentes tipos de face painting. Entre ellos, cabe mencionar:

  • Diseños que incluyen emblemas, como los de los equipos de fútbol o cualquier otro deporte.
  • Emblemas que apelan a series de dibujos animados o personajes de estas. Este tipo de face painting es, principalmente, para niños.
  • Recursos válidos para cualquier edad.
  • Dibujos que transforman nuestra apariencia en algo completamente diferente. Por ejemplo, si nos disfrazamos de robot, pintando nuestra cara en color plateado, dando la sensación de una textura absolutamente distinta.
  • Dibujos que se hacen en solidaridad con una causa y en los que, más allá de la diversión, predomina la reivindicación al llevarlos.

Entre los diseños más comunes, se encuentran los de animales. El tigre es una opción bastante llamativa y muy utilizada. Lo más común en estos casos es que la cara se pinte con tonos anaranjados o amarillos; a continuación se pintan las rayas negras sobre este fondo y la nariz.

El gato también suele ser uno de los favoritos, o cualquier felino. Bastará con remarcar los bigotes, diseñar unas cejas tupidas y pintar la nariz de negro para que sea identificable como tal.

En lo que respecta a los perros, el más frecuente es el dálmata: sobre un fondo blanco, habrá que dibujar puntos negros en torno a los ojos y las mejillas, con un hocico negro.

Si pensamos en la representación de personajes de ficción, el que más se repite en face painting es Spiderman: fondo rojo, con contornos negros que simulan la tela de araña y recrean, en conjunto, la máscara del superhéroe de Marvel.

Por supuesto, también son muy comunes las recreaciones de mariposas —especialmente entre las niñas— y las diferentes variedades de payaso.