“…Yo haré de ti, la reina del Halloween”

Si me dijeran ahora mismo quien es la persona que más disfruta del carnaval y tuviera que contestar antes de que me dijeran “responde en 3 segundos…uno…” rápidamente gritaría “Heidiiiiiiiii…Heidiii Klumm!”.

Y es que parece que la modelo ha cogido el gusto a eso de desfilar con las míticas alas del desfile de la casa de ropa interior Victoria Secret. Seguro que es llegar el día 2 de Noviembre y ya su linda cabecita estar dando vueltas de cómo puede superar el disfraz para el año próximo.

Ya sea disfrazada en solitario o con su ya ex marido, el cantante Seal. La alemana aprovecha cualquier ocasión para disfrazarse. No sabría con cuál de sus atuendos quedarme. Pero si se cuales me sorprendieron más, y son los siguientes:

¡Pero qué monos!

Klum y su entonces marido Seul, decidieron ir caracterizados como recién sacados de la película de “El Planeta de los Simios” se tratara. Creo que sin duda uno de los disfraces más logrados que hayan lucido, sin duda.

No puedo ni imaginar la situación de estar hablando con un mono, sabiendo de detrás de tanto pelo hay una de las mujeres más bellas del mundo… Cosa que tampoco pone fácil hablar con esos pechos asomando, que es sin duda lo mejor del disfraz. ¡No podría parar de reír!

La más aterradora Diosa Kali

Una idea que la propia Heidi reconoce que le dió su asistente. Heidi había visitado la India recientemente con Seal. Así que buscaron en Internet diosas hindúes hasta llegar con la aterradora diosa Kali.

La verdad es que es genial el traje, con todos esos accesorios, los brazos, las calaveras en el collar, esa falda hecha con restos de las victimas… Un grandioso disfraz a mi gusto.

Claro que no pensaron lo mismo la comunidad hindú, que tras ver a la modelo caracterizada como una de sus diosas hicieron saber su desacuerdo y negativa hacia su decisión con el disfraz elegido.

 Dejándose la piel en cada Halloween

Y no es un decir, la modelo acudió a la fiesta montada sobre una camilla cubierta con una sábana. La gente se quedó sin aliento cuando, al retirar la tela, apareció ella sin lo que le da de comer, su cabellera rubia, su rostro y su piel.

Un cuerpo mostrando los músculos que más de uno quisiera recordar del cole para haber tenido algún tema con el que hablar con ella.

Escalofriante, incluso macabro. Dio de lleno en el que seguramente sea el mejor traje que nunca ha tenido cualquier fiesta de Halloween.