Máscara de cartón duro

Uno de los accesorios más comunes en Carnaval son las máscaras. De este modo, nos hemos puesto a investigar cómo podemos fabricar nuestra propia careta en casa. Una de las opciones más sencillas, aptas para ser confeccionadas con la colaboración de los niños es la que vamos a explicaros en este artículo.

Materiales:

  • Papel de cartón grueso
  • 1 Plato
  • Algodón
  • Papel de seda de colores
  • Bolígrafo
  • Pincel
  • Tijeras o cutter.
  • Pegamento o cola.
  • Un palo fino y alargado
  • Cinta de carrocero

Paso 1. Tomamos el cartón y lo apoyamos sobre una mesa. Con la ayuda de un plato, marcamos el contorno sobre el cartón.

Paso 2. Recortar la circunferencia, dibujar la cara sobre el cartón: ojos y boca (intentaremos que coincidan con nuestra cara) y los recortaremos igualmente. Lo ideal es que los ojos sean grandes y alargados, para que puedas ver siempre bien; en lo que respecta a la boca, deberás trazar una amplia sonrisa.

Paso 3. Con algodón, hay que cubrir las siguientes zonas: las mejillas, la nariz, el contorno de la boca y la zona superior a los ojos. Antes de pegar el pegamento, podemos dibujar el contorno de por dónde lo colocaremos.

Paso 4. Pegar el papel de seda, con ayuda del pincel, sobre el algodón, cubriéndolo. Hay que poner al menos, 3 capas de papel. Dejándolo secar.

Paso 5. Cubrir el resto de la máscara con papel de seda colores.

Paso 6. Coger el palo y adherirlo a la parte trasera de la máscara con cinta de carrocero. Si queremos, podemos pintarlos previamente de algún color que se adecue a los tonos de la máscara con acuarelas. Incluso podemos forrarlo con tiras de cinta carrocero para pintarlo con forma de rayas uniformes.

Paso 7. Es el momento de detallar tu máscara. Puedes usar tachuelas o lentejuelas que podrás pegar con pegamento instantáneo. Otra opción será que lo decores con purpurina.

La forma circular es óptima que queremos, por ejemplo, hacer la máscara de un Sol. En este caso, sobre los labios pondremos papel rojo, sobre las mejillas naranja y sobre los ojos y en la nariz, amarillo.

También podemos hacer flecos, recortando tiras de papel, y pegándolos en los extremos de la máscara. Lo ideal es que no sean demasiado largos, para que no se rompan.

Si el motivo de la máscara es diferente, podemos optar por una forma un poco más alargada. En lugar de usar un plato como plantilla, puedes emplear algún otro objeto con forma ovalada. También puedes usar el plato como base y afilar el círculo en la zona que correspondería a los pómulos.

Esperamos que sea de vuestro agrado y que lo paséis tan bien confeccionándola como llevándola.